Las amistades son importantes, pero también hay que cuidarlas. Muchas veces tener una amistad sana y fuerte es difícil, pero si sabemos escuchar al otro, tenemos gustos en común que nos den paz interior, como asistir juntos a algún hobbie, rezar juntos versículos de amistad, o hasta ir al gimnasio juntos, ayudará a sentirse más cercanos.

Mantener las amistades: ¿más fácil o más difícil que nunca?

Según la Asociación Alemana de la Industria Digital, pasamos una media de 71 minutos al día en las redes sociales, y últimamente probablemente mucho más. Sin embargo, ni los emojis ni un bonito mensaje pueden sustituir el efecto de un abrazo real de otra persona. Pero actualmente, incluso eso no siempre es posible debido al distanciamiento social. ¿Condiciones difíciles para las amistades? Es hora de hacer un balance de la situación y preguntarse en general:
¿Cuánto tiempo pasas en WhatsApp, Facebook y compañía? ¿Y cuánto vives con tus amigos?

Los amigos son un bálsamo para el alma

Para la mayoría de las mujeres, la mejor amiga es una parte muy importante de la vida. Es un bálsamo para el alma, comparte las alegrías y las penas, da la sensación de seguridad, retroalimenta. Las amistades nos hacen bien: su auténtico apoyo social amortigua el estrés, nos hace sentir bien e incluso refuerza las defensas del cuerpo y del alma. Así, los buenos amigos contribuyen a nuestra fortaleza mental y emocional.

En su último libro, «El poder de las mujeres. Fuerza mental para mujeres», Antje Heimsoeth trata de las interacciones entre el pensamiento y la acción y de los escollos femeninos como el autosabotaje, la comparación o la manía de la belleza. Además, autores invitados del mundo empresarial y del coaching dan su opinión. El libro fue publicado por Springer el 24 de mayo de 2018.

Ganar y mantener amigos, sin embargo, requiere más que clics y mensajes cortos. Con estos diez sencillos consejos, conseguirás fácilmente construir, alimentar y mantener nuevas amistades.

Diez consejos para mantener las amistades:
Acércate a los demás con franqueza y sonríeles al hacerlo. Esto abre muchas puertas.
Sea sincero. El juego de la confianza suele ser el principio del fin de una amistad.
No finjas, sé auténtico. Al fin y al cabo, quieres que te quieran por lo que eres.
Escucha activamente. Deja hablar a tu interlocutor y muestra empatía al mismo tiempo. Las preguntas abiertas, la aceptación y la atención son beneficiosas.
La amistad no es un grupo de personas con las que pasas el rato por conveniencia. Asegúrate de que es una calle de doble sentido.
Acepta a tu prójimo por lo que es. Esto requiere que te aceptes a ti mismo.
Sé fiable.
Tolera las críticas, pero mantén una actitud cariñosa y agradecida al darlas.
Programe reuniones, experiencias compartidas y un mensaje en el ínterin.
Aunque sea porque sí, regala pequeñas atenciones y placeres.
Ejercicio: ¿Cómo son tus relaciones personales en este momento?
Dibuja un diagrama de tus relaciones en un papel. El «yo» en el centro de la hoja eres tú. Escribe los nombres de las personas con las que te relacionas por todas partes. El grosor de las líneas puede representar la importancia de las relaciones.

¿Cómo calificarías tus relaciones?

• denota una relación que es muy mala y estresante.
• de forma negativa
  Las relaciones que son neutras reciben una puntuación de 0.
• para excelente y
  ++ para las relaciones excelentes e ininterrumpidas

A continuación, analiza las relaciones y responde a las siguientes preguntas para cada una de ellas:

¿Cuál es el estado de tus relaciones?
En estas relaciones, ¿qué es lo más importante para ti?
Al examinarlas más de cerca, ¿dónde encuentras deficiencias y carencias?
¿Qué impacto tienen en tu relación, en la familia, en el trabajo, en el trabajo de los demás, en ti mismo, en tu estado de ánimo, etc.?
¿A qué deberías prestar atención en el futuro para mejorar las relaciones individuales?
¿Qué esperas conseguir?
¿Qué harás diferente esta vez de lo que hiciste antes?
¿Cómo son tus amistades?

No se trata sólo de ir a donde quieres ir en la vida; también se trata de con quién estás. ¿Has notado que hay algunas relaciones tensas en tu entorno cercano? Pues mira qué puedes hacer para mejorar la calidad de la relación. ¿Qué factores son los más estresantes? ¿Puedes, por ejemplo, influir en la relación teniendo una discusión abierta y nombrando lo que te molesta o te obstruye? Si no puedes cambiar positivamente una relación estresante, deberías considerar la posibilidad de ponerle fin. A veces es necesario poner fin a una relación para estar contigo mismo. Esto requiere fortaleza mental y emocional al tiempo que libera nuevas energías y perspectivas. ¿Te has dado cuenta de que tus relaciones son a menudo neutras? Entonces pregúntate: «¿Por qué lo haces?» y «¿Qué quieres de estas relaciones?». El primer paso para pasar de una relación neutra a una buena es la apertura. Sé abierto contigo mismo y con tus necesidades, así como abierto en tus interacciones con los demás. Todo cambio comienza con un cambio de perspectiva.